Mediante un sencillo análisis de la piel el/la profesional podrá crear un PROTOCOLO PERSONALIZADO EN 4 PASOS: limpieza, peeling, aditivo y sellado. De esta forma, será capaz de seleccionar que más se adecúen a las necesidades del cliente y ofrecer así soluciones eficaces para recuperar su juventud y garantizar una piel sana y bella.